No mates al mensajero

Un mensajero avanzaba presuroso por el bosque para poder llevar un mensaje a tiempo. Llegó al lugar donde se encontraba en retiro un Samurai y golpeó a su puerta. Inmediatamente el Samurai abrió y el mensajero expresó: tengo un mensaje para ti y vengo a decírtelo porque me he comprometido a ello. El Samurai expresó: apúrate porque estoy ocupado en mis menesteres y debo seguir con lo que estaba haciendo. Qué me quieres decir? Vengo a decirte que tu esposa se ha marchado con tu amigo más cercano y que ha dejado abandonada tu casa. Ante esa noticia el Samurai sacó su espada y degolló al mensajero.

Esta pequeña historia demuestra que estamos acostumbrados a matar al mensajero como si tuviera la culpa del mensaje que nos está entregando. El mensajero en tu vida es la persona o situación que te hace sentir las más bajas vibraciones de miedo, temor, ira, rabia, furia, depresión y que en el fondo te está indicando de manera clara lo que debes trabajar y lo que te está afectando. Entonces porqué matas al mensajero? Porqué no escuchas su mensaje sin salirte de tus casillas y te pones a trabajar en ello?, en lo que te está diciendo y que todavía te afecta?

Consideras que está bien que si el cartero llega a tu casa con las Facturas de tus servicios públicos tu lo agredas o le pegues porque sabes que no tienes el dinero para pagar? Porqué lastimas al mensajero? Porqué lo tomas personalmente con él?

Un mensajero te entrega ante tus ojos los aspectos de tu vida que no han sanado y que debes trabajar de forma consciente para poder salir adelante. Solo cuando decides trabajar lo que el mensajero te indica empiezas un nuevo camino de crecimiento. Puedes pensar que el mensajero tiene la culpa pero no es así, simplemente te está mostrando algo que te afecta y que puede venir de situaciones sembradas en tu niñez o en tu pasado que todavía no has superado.

Y cómo viene el mensajero? A veces se presenta como tu jefe, tu amigo que te critica y te duele en lo profundo, tu vecino que te hace poner triste, tu esposa que no entiende lo que dices, tu amante que te abandona, tus padres que no te comprenden, aquel compañero de trabajo que te saca de tus casillas, aquella situación que no soportas y que te deprime o te lleva a una profunda tristeza. Ese es el trabajo del mensajero, así que identifica el mensaje pero no castigues al mensajero porque él no es consciente de lo que está haciendo, simplemente es utilizado por la vida para enfocarte en trabajar un aspecto que debes superar.

Y cómo sabes que debes trabajar algo? Porque te produce un sentimiento de baja vibración como el miedo, la ira, la tristeza, la depresión. Esto indica que en esa situación existe algo que debes superar de forma consciente. Cuando el mensaje no es para ti o no te corresponde no sucede nada en tu interior.

Por ejemplo, imagina que no te interesa para nada que algún vecino ponga su música a todo volumen. Cuando esto suceda simplemente lo disfrutarás o sencillamente nada pasará por tu cabeza y ningún sentimiento de baja vibración llegará a ti.

Pero ahora imagina que nunca has podido con las personas bulliciosas y ese vecino te pone la música a todo volumen. Entonces llamarás a la policía, golpearás a su puerta, le reclamarás de forma airada y te sentirás furioso, desesperado, triste, con ganas de acabarlo. Simplemente ha tocado uno de tus puntos débiles que debes trabajar de forma consciente y sólo cuando aceptes la situación y tomes cartas en el asunto la situación externa se resolverá por sí sola. Es decir, si decides aceptar que tienes un problema con las personas bulliciosas, cuando aceptes y empieces a trabajar en ello, esas personas simplemente dejarán de pasar por tu vida, nunca te volverán a importunar porque has aceptado y has trabajado de forma consciente este aspecto tuyo. Ten presente que si algo te duele profundamente significa que en ese aspecto debes trabajar muy duro.

Ahora imagina que no aceptas a tu vecino bullicioso y que cada vez que lo veas te desesperas, que quieres salir corriendo. Si esto es así, toda la vida a donde llegues tendrás un vecino bullicioso sin saber porqué, hasta que decidas trabajar de forma consciente en ese aspecto de tu vida o simplemente dejarás esta encarnación sin poder superar esta situación.

Esto no significa que te resignes, porque la resignación es una “aceptación falsa” donde sientes que te estás sacrificando, donde sientes que perdiste y que tienes que esforzarte para estar bien. Esto es muy diferente a la aceptación, donde con el corazón alegre sabes en lo profundo que las cosas están organizadas de acuerdo con el orden divino y de la forma apropiada para tu crecimiento. Así que no confundas aceptar con resignar porque son dos polos tan opuestos como el norte del sur, y el occidente del oriente. Escucha a tu corazón, escucha al mensajero y pide a la divina presencia luz, amor y sabiduría para reconocer lo que debes trabajar en ti mismo y verás como de forma automática el mundo se organiza a tus pies. Este es el único camino verdadero. Cambia adentro para que veas el cambio afuera, no hay otra forma de hacerlo.

Así que no mates al mensajero, solo escucha su mensaje y trabaja en él para que tu nivel de consciencia sea mayor cada uno de tus días.

En amor y servicio,

Trabajadores de La Luz.