miércoles, 17 de julio de 2013

Se tan ordinario que desaparezca todo deseo de ser extraordinario

Se tan ordinario que desaparezca todo deseo de ser extraordinario



"Ser ordinario es lo más extraordinario del mundo, porque todo el mundo quiere ser extraordinario. Nadie quiere ser ordinario. Ser ordinario es lo único extraordinario... Si preguntas a los maestros zen: "¿Qué es lo que hacen?", te contestarán: "Recogemos leña del bosque, llevamos agua del pozo. Comemos cuando tenemos hambre, bebemos cuando sentimos sed, nos acostamos cuando estamos cansados. Eso es todo".

No parece ser gran cosa: recoger leña, llevar agua, dormir, sentarse, comer. Te dirás: "Ésas son cosas ordinarias. Todo el mundo hace eso".

Pero no son cosas ordinarias, y nadie las hace. Cuando recoges leña, estás condenándolo, pues te gustaría ser presidente de algún país. No quieres ser leñador. Condenas el presente a cambio de un futuro imaginario. Llevar agua de un pozo te parece que es desperdiciar tu vida. Te enfadas. No estás hecho para cosas tan ordinarias. Has llegado con un gran destino: conducir a todo el mundo hacia un paraíso, hacia una utopía. Todo eso no son más que proyectos del ego. Son estados de conciencia enfermizos.

Sé ordinario... Y de repente lo que consideras trivial dejará de serlo, lo que llamas profano dejará de serlo. Todo se torna sagrado. Llevar leña se convierte en algo sagrado. Sacar agua del pozo se convierte en sagrado.

Y cuando todos los actos se convierten en sagrados, entonces todos y cada uno de ellos devienen meditativos y piadosos, sólo entonces penetras en la vida... Y entonces la vida te desvela todos sus misterios. Te tornas capaz. Te tornas receptivo. Cuanto más receptivo eres, más disponible está la vida.


Ésa es toda mi enseñanza: sé ordinario, sé tan ordinario que desaparezca todo deseo de ser extraordinario. Sólo entonces puedes estar en el presente; de otro modo no puedes estar en el presente".

OSHO

Comentario:

El deseo de ser extraordinario y sobresalir sobre los demás prevalece con el objetivo de evitar a toda costa que tengas que estar solo frente a tí mismo. Estar solo frente a frente contigo mismo es una de las cosas más difíciles y es definitivamente para los valientes. Estás en silencio, no hay nadie, no hay televisor, no hay radio, no hay amigos, no hay ningún compromiso, no hay ninguna cita, no hay afán, no hay ningún desafío, no tienes que ir a salvar el mundo, no tienes que mostrarle a nadie tu capacidad o tu inteligencia, nadie te escucha, nadie te ve, entonces algo mágico pasa, algo que solo es para los valientes porque afuera no hay nada que hacer y todo el desafío se enfoca en trabajar dentro de tí. Ahora estás contigo y te preguntas, soy feliz? Claro tengo todo, una casa, unos hijos. No, no, no .... no te pregunto que tienes o qué haces, te pregunto si eres feliz? .. Y de pronto te das cuenta que responder esta pregunta es un desafío personal pero cuando lo haces y tomas consciencia, todos los apegos se disuelven, todas las dudas se van, una inmensa alegría llega pero hay que recorrer un camino, hay que estar solo contigo mismo, hay que regresar a lo básico, a ser simple, sencillo, a levantarte, ir por la leña, hacer tu meditación, tomar tu café, recoger agua, comer, meditar, orar, pensar, hacer las labores de la casa, trabajar en tí mismo ... y esto es la mayor meditación porque te regresa a tu centro, a vivir el presente y a hacer las cosas básicas y simples que te acercan a Dios.

Pero mientras eso pasa y vences tu miedo a estar contigo mismo, buscarás mil cosas en las cuales ocuparte, mil cursos que hacer, entre más compromisos mucho mejor porque tienes la excusa perfecta ... Oh, no puedo, no tengo tiempo para estar conmigo .. debo trabajar, debo hacer este curso, debo estudiar arte, debo ayudar a las personas .. tantas ocupaciones !!! pero cuando tenga tiempo trataré de estar conmigo mismo. Es más fácil hacer todas estas cosas que decidirte a estar contigo mismo. Por eso siempre encontrarás un curso que hacer, un amigo al que visitar, un compromiso más que cubrir, un desafío más que alcanzar, ser el presidente de la empresa, ganar la medalla al mejor y después para poder mantener ese sueño de ser el mejor, tendrás que dejar toda tu energía hasta enfermar. Solo en ese momento te atreverás a estar contigo mismo, cuando te des cuenta que lo de afuera es una ficción, que todo se arregla solo si trabajas adentro. Entonces volverás a lo básico, seguirás en el mundo pagando tus cuentas, haciendo tus labores pero sin huir de ti mismo, sin hacer tantas cosas para estar ocupado y huir de tu presente, solo entonces encontrarás el verdadero camino.

En amor y servicio,

TRABAJADORES DE LA LUZ



1 comentario:

  1. La Decisión de estar conmigo misma es la que pospongo día a día, buscando ocupar mi mente con pensamiento del pasado o del futuro.

    Tomo acción, comienzo a caminar hacia mi, paso a paso: las meditaciones diarias, el silencio de la mañana......

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